Las entidades defienden que la sociedad murciana tiene la obligación legal y moral de conservar esta singular especie, que debería ser considerada un emblema regional.
El estudio del Museo Nacional de Ciencias Naturales evalúa también la vulnerabilidad de estos espacios frente al cambio climático y destaca el riesgo por aumento del número de inundaciones en el mediterráneo.
Tras dos décadas de intentos, un equipo liderado por la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) ha logrado grabar el sonido de un nóctulo grande depredando un petirrojo europeo en el aire.
Un estudio, liderado por el IEO-CSIC, rompe con la idea de que la este espacio es un entorno inalterado al revelar la presencia de metales tóxicos y compuestos químicos en los suelos de las colonias de estas aves.
Se trata de una lista de especies cuya tenencia y comercio están permitidos, quedando prohibidas todas las demás, un sistema que protege a las especies por defecto y que aporta ventajas como su fácil aplicación, su simplicidad o su visión integral.
El estudio multidisciplinar del IEO permitirá caracterizar la población que visita esta zona y estudiar su conectividad, los patrones de migración y su estado de salud.
La resolución del Ministerio de Cultura supone un espaldarazo a la protección de la huerta de Murcia y abre nuevas vías de defensa para su red milenaria de acequias y regadíos tradicionales.