Son datos extraídos del censo de 2023, de los que WWF se felicita pero recuerda que la especie "sigue amenazada por atropellos, furtivismo y el descenso de la población de conejo de monte".
Se ha recuperado medio centenar de fósiles de esta especie de 1,1 millones de años, y la investigación continúa con el hallazgo de numerosas costillas, partes del cráneo y vértebras. Entre las conclusiones, destaca que el animal era algo más grande que los linces que conocemos hoy en día.
Para su producción, se han gastado aproximadamente 50 millones de litros de agua provenientes del acuífero Cingla, que abastece a Yecla y Jumilla, y que se encuentra sobreexplotado casi al 300%, según advierte la plataforma ciudadana 'Salvemos el Arabí y Comarca'.
Referente nacional en el reconocimiento de las vocalizaciones de la avifauna, e invidente desde los seis años, defiende que «los sonidos de las aves son el lenguaje que cuenta lo que está pasando en el campo».