Cada año se comercializa de forma ilegal con 1,5 millones de aves vivas y 440.000 toneladas de plantas medicinales, y se matan unos 110 tigres, 1.200 rinocerontes, 30.000 elefantes y 100.000 pangolines.
Una treintena de voluntarios compartimos ayer la primera jornada de repoblación de la jara de Cartagena, que sólo crece en la Región de Murcia y en la Comunidad Valenciana y que atraviesa un momento crítico para su subsistencia. Y de paso, participamos en la experimentación con un nuevo sustrato para esta planta: la fibra de coco.
Desde hoy y hasta el 10 de noviembre, en el Valle de Güímar se pone en marcha esta acción experimental del proyecto LuMinAves al que pueden unirse todos los ciudadanos. La idea es permitir un vuelo nocturno más seguro a pardelas, paíños y otras especies.
Había ingresado en el Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre de El Valle en febrero, después de que fuese hallada herida por un agente medioambiental.
El proceso arranca tradicionalmente con la conclusión del verano, y es un ejemplo de "cómo la actividad salinera humana ha contribuido a configurar las tramas paisajísticas y ecológicas que supone el paraíso para las aves y su compatibilidad con una actividad socioeconómica" para la directora general del Medio Natural de la Comunidad de la Región de Murcia.
La entidad ha localizado los desechos en la Acequia Menor de Villanueva y un escorredor cercano a la desembocadura de ésta en la pedanía murciana de Beniaján gracias a una denuncia ciudadana.
El consumo de peces que contienen este tóxico es el origen de una conocida intoxicación alimentaria. La contaminación se debe a unos microorganismos característicos de latitudes tropicales que parecen estar en expansión en el archipiélago debido al calentamiento global.
Los ejemplares soltados en Valencia proceden de una puesta del año pasado en una playa concurrida y cuyos huevos fueron recogidos para su salvaguarda. Su evolución se podrá seguir por Internet.