Naturactúa y Ecologistas en Acción, que esta mañana han desplegado una pancarta como acto de protesta y condena a estos hechos, exigen también la restauración ambiental inmediata de las áreas afectadas y mayor vigilancia en la zona.
Además, WWF organiza el domingo actividades en 13 localidades y 3 centros comerciales de España para alertar contra la pérdida de biodiversidad y el Cambio Climático.
Los estudiantes del colegio público Francisco Noguera Saura de San José de la Vega han plantado un centenar de arbustos y 30 árboles en este itinerario, bajo el lema ‘Desenchúfate y súbete al tren de la vida. Ven a la Vía Verde’.
Las nuevas recomendaciones dadas por el organismo revisor consisten en continuar vigilando su estado de conservación, en especial los efectos del Cambio Climático sobre las comunidades marinas, y avanzar hacia un modelo de financiación sostenible.
Se trata de una de las Reservas Naturales Fluviales de la cuenca del Segura debido a su singularidad y a su alto valor medioambiental. La asociación ecologista realizará tareas de limpieza, conservación, eliminación de Especies Exóticas Invasoras y divulgación.
Y propone controlar y erradicarlas en la presentación oficial de Life Invasaqua, un proyecto financiado por la Unión Europea para mejorar el control de estas EEI acuáticas en la península Ibérica.
Además, se ha detectado un claro aumento de la extensión de los climas semiáridos, estimado en 50 años en más de 30.000 km2 (en torno al 6% de la superficie de España). Las zonas más afectadas son Castilla-La Mancha, el valle del Ebro y el sureste peninsular.
Un estudio internacional calcula que actuaron como sumidero de 34 gigatoneladas de este gas antropogénico entre 1994 y 2007. Ello contribuye a suavizar el calentamiento global, pero el dióxido de carbono disuelto acidifica las aguas y perjudica gravemente la vida de los organismo marinos.
El origen del incendio, que calcinó más de 12.000 metros cuadrados de masa forestal, fue una quema de restos de poda. En la investigación, la Guardia Civil de la Región de Murcia ha contado con la colaboración de agentes medioambientales.
El control del insecto incluye por primera vez el uso de estos aparatos no tripulados y equipados con cámaras multiespectrales. Las actuaciones se complementan con la retirada manual de los bolsones y su eliminación con cañones de alta presión, instalación de nidos de aves insectívoras o tratamientos químicos.