A la anguila le gustan las acequias
Presentan los resultados preliminares del seguimiento biológico del Proyecto Anguila
Las acequias constituyen el hábitat del Segura donde la anguila es más abundante y donde los ejemplares presentan un mayor tamaño y condición corporal. Así lo está constatando hasta ahora un estudio aún en curso que está desarrollando la Asociación Columbares sobre la anguila europea en el río murciano y en la red de riego de la Huerta de Murcia. Un animal considerado 'en peligro crítico de extinción' por la unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, y que vuelve a nadar por estas aguas.
El trabajo, denominado Proyecto Anguila, ha tomado datos desde octubre de 2016 y hasta el pasado mayo, y revela que tanto el peso como la longitud total promedio de los ejemplares son mayores en las acequias que en los otros dos ambientes estudiados, que son el propio cauce principal del río Segura y los azarbes de la Huerta. Y en concreto, señala a la acequia de La Aljufía como el punto que presenta los valores máximos más elevados de densidad y biomasa de la especie en la zona de estudio.
David Verdiell, uno de los científicos que lleva adelante el proyecto, coordinado por Paz Parrondo, incluye entre los posibles motivos de la abundancia de la especie en la acequia de La Aljufía el hecho de que en este tramo se concentran varios molinos antiguos con sus pozas asociadas, que sirven de refugio a la especie cuando el agua de la red de riego se corta. Por contra, otras zonas, como la acequia de La Alquibla, no tienen tantos molinos y, por ende, hay menos pozas y estos animales tienen menos posibilidades de sobrevivir. Y es una situación que se da año tras año. Este invierno pasado, por ejemplo, el agua se cortó durante dos meses, y ahí "las pocas anguilas de La Alquibla no encuentran refugio y mueren, como otros peces de la zona", lamenta.
Así, sugiere que cuando el agua se vaya a cortar tanto tiempo, se suelte una cierta cantidad cada semana, por ejemplo a lo largo de un día, para poder renovar el cauce; o que cuando se vayan a realizar las mondas (limpiezas) de los bordes, que el agua no se corte de golpe, "porque si se bajan las compuertas en diez minutos a las anguilas no les da tiempo a volver a su refugio o a buscar otro", advierte. "Es mejor que el corte de agua sea progresivo", recomienda al respecto el experto, a quien, por cierto, le gustaría ver agua siempre corriendo por los cauces "pensando también en otras especies", deja caer.
El biólogo cree también que la anguila se encuentra mejor en estos canales quizá porque "pese a que el río es más grande, en las acequias tiene menos competidores y seguramente también menos depredadores, como la nutria, que ya está en el cauce". A ellas se unen las aves piscívoras, como las garzas, que dan buena cuenta de las anguilas.
En cualquer caso, los investigadores, que el lunes pasado presentaba los resultados preliminares del seguimiento biológico de este estudio, han podido comprobar que el animal ocupa actualmente los tres tipos de ambientes muestreados. Una buena noticia, ya que es una especie clave en los ecosistemas fluviales. De hecho, es uno de los pocos peces depredadores de la península Ibérica, donde también se alimenta de carroña.
LOS CANALES DE LA HUERTA
La Huerta de Murcia tiene un intrincado diseño de canales. Las ACEQUIAS toman el agua del río. Las acequias mayores, en concreto, la toman de La Contraparada. De aquí se dirigen a las acequias menores, los brazales, regaderas hasta llegar por fin al campo de cultivo. Una vez aquí, el agua sobrante se recoge por las azarbetas, azarbones, AZARBES mayores, y puede ser devuelta al río, o bien dirigirla a una acequia y usarse de nuevo para más riegos.
En todo momento, Verdiell habla de los resultados "con cautela, porque son preliminares" ya que aún faltan dos campañas que se realizarán una en este mismo mes de junio y la otra principios de septiembre, y aún pueden aparecer variaciones o nuevos aspectos sobre lo hallado hasta ahora. En este sentido, aspira a que el proyecto se prolongue en el tiempo, ya que un año es un "recorrido temporal demasiado breve".
Lo que sí tienen claro los investigadores es la importancia de la red de riego de Murcia. Los azarbes, que tienen comunicación con el río, hacen de vías por las que las anguilas que ya han entrado al cauce principal vayan recolonizando aguas arriba. Por su parte, las acequias hacen de hábitat final de la anguila. Aquí es donde aparecen los ejemplares plateados, ya maduros, los que de un momento a otro volverán al mar a realizar su asombrosa y titánica migración. Así que la red de riego "es un hábitat potencialmente disponible y se tienen que mejorar las condiciones en las que se encuentra", defiende Verdiell, quien lamenta al respecto el mal estado de conservación de los azarbes, razón por la cual les ha llamado tanto la atención encontrar allí también ejemplares de anguila. "Es sorprendente", deja caer.
Por lo demás, el estudio desarrollado les ha brindado el curioso hallazgo de que la longitud total promedio de los ejemplares capturados desciende bruscamente en la campaña de febrero, mientras que los valores mínimos se han obtenido en abril, con tendencia a recuperarse en mayo.
Por su parte, la abundancia muestra un incremento significativo en la misma campaña de febrero, y en primavera se mantiene en valores superiores a otoño. Al respecto, los investigadores sugieren que la presencia de caudales muy elevados en el Segura durante el invierno 2016/17 puede estar relacionada con el incremento posterior de la abundancia de la especie debido al “efecto llamada” y a la facilitación de la migración fluvial de la especie.
Para este muestreo, que se ha realizado en el tramo del río Segura comprendido entre el azud de la Contraparada y la localidad de Beniel así como en la red de riego de la Huerta de Murcia, han instalado hasta 600 trampas tipo nasa y han invertido un total de 1.226 horas de tiempo de pesca.
Todo ello, con el objetivo general de evaluar el estado poblacional y el uso del hábitat de la especie (Anguilla anguilla) en este área de estudio. Un trabajo que les ha llevado a visitar 19 localidades, en nueve de las cuales localizaron al pez. En total, se han capturado 78 ejemplares, un 95% de los cuales eran anguilas amarillas y el 5% restante fueron anguilas plateadas, es decir, ya maduras, y que solo aparecieron en las acequias.
Los resultados indican también que la presencia de especies exóticas es un gran problema del Segura.
En este sentido, el trabajo ha encontrado que la comunidad de peces acompañante está formada casi exclusivamente por especies exóticas invasoras, y advierte de que "la elevada abundancia de carpas en azarbes y acequias constituye un factor negativo que impide la recuperación de la calidad del hábitat para la anguila en estos ambientes". Entre las especies de peces capturadas hallaron carpa (25), barbo del sur (18), gobio (15), alburno (6), carpín (3), gambusia (2). La anguila y el barbo son las únicas especies autóctonas aquí, el resto son exóticas e invasoras.
(Imágenes no firmadas por elclickverde: Proyecto Anguila de la Asociación Columbares).