AMUS ha concluido con éxito la primera tutorización de la crianza de dos pollos de águila imperial ingresados en su centro por parte de un ejemplar adulto irrecuperable, según informa la entidad en una nota de prensa en la que repasa las acciones de refuerzo de la población de esta especie endémica de la Península.
Los dos pollos, que ingresaron con muy corta edad, fueron fijados con una correcta impronta por parte del ejemplar -una hembra- que ejerció de parental.
AMUS ha recuperado y liberado ocho las águilas imperiales en los últimos cuatro años. Solo una de ellas, 'Orel', murió por electrocución al año de su puesta en libertad. "Las demás campean libremente desafiando fronteras, límites puestos por los humanos que separan las tierras en provincias, comunidades autónomas, países… es la manifestación en mayúscula de la libertad".
Gracias a estas acciones, estas aves realizan vuelos a más de 2.000 metros de altura y cruzan cientos de kilómetros entre Portugal, España y el continente africano. Hay ejemplares que han pasado por la mesa de un quirófano y por las manos "de todo un equipo volcado con pasión en la recuperación y devolución de estos ejemplares tan valiosos". Algunos han sido electrocutados, otros disparados o afectados por olas de calor, y otro, como es el caso de 'Lluvia', fue liberado con una sola garra.
El texto recuerda que la aportación por parte de AMUS junto con la Dirección General de Sostenibilidad de la Junta de Extremadura al mantenimiento de especies amenazadas se convierte en toda una respuesta que "no solo reinserta especímenes totalmente restablecidos al medio natural de gran significado y valor, sino que al mismo tiempo trabaja codo con codo y con diferentes entidades públicas en la reducción de las problemáticas o de las causas que las hacen quedar heridas o inhabilitadas".
El águila imperial ibérica (Aquila adalberti) es una de las grandes águilas, una de las más amenazadas del mundo, y genuina de Iberia. Es decir, es endémica de la península Ibérica, en ningún otro lugar del planeta las hay. "Los bosques extremeños regentados por encinas y alcornoques representan además de un ecosistema igualmente valioso y único, el escenario natural que este águila de cabeza enfundada de color de arena y hombros salpicados de nieve eligió para vivir", describe la nota.
AMUS subraya que "Extremadura lidera las primeras filas en lo que se refiere a efectivos de esta especie, adquiriendo un papel determinante en la conservación de la población ibérica". Estos territorios son un "testimonio de referencia en cuanto a espacios muy poco modificados por la huella del hombre; amplios espacios agrestes con escasa demografía en los que se conjugan vastas dehesas y sierras cuarcíticas bien matorralizadas. Manifestaciones de la vida salvaje en perfecta soledad de lo que ha sido poco invadido, ambientes mediterráneos, áreas icónicas no solo para imperiales sino para el resto de especies paraguas en ecosistemas mediterráneos (buitre negro, cigüeña negra, alimoche…). Hablamos de Monfragüe, Sierra de San Pedro o el valle del Matachel en el sur de la provincia de Badajoz".
La organización se siente "muy satisfecha por este trabajo desarrollado, altamente especializado y que supone una gran contribución para una especie tan sensible, tan especial y tan genuina de la península Ibérica", y agradece "a todo un equipo" formado por los agentes del Medio Natural, los efectivos del Seprona y la Dirección General de la Junta de Extremadura y a Enel Green Power, por la financiación de uno de los emisores colocados en estas águilas.
2023-11-03
A la izda., pollos en un nido artificial cuidados por un adulto en el hospital de AMUS. A la decha., otra cría familiarizándose con la instalación. Fotos: AMUS.
Primer plano del ejemplar adulto irrecuperable que ha ejercido como parental en la crianza de dos pollos de águila imperial en el hospital de AMUS (Melendri y Calderón). Foto: AMUS.
Instalación que emula el espacio de un nido en el que han sido criados dos pollos con un tutor adulto. Foto: AMUS.
Desplazamientos y zona en la que se encuentra Calderón, a muchos kilómetros del lugar en el que se liberó. Imagen: AMUS.
Colocación de uno de los emisores GPS en un joven de águila imperial (Melendri, el ejemplar que ha cruzado el Estrecho de Gibraltar rumbo a África y que fue liberado en el Parque Nacional de Monfragüe). Foto: AMUS.
