Poco más de tres años después de la última cita, tras un parón por la pandemia, Alhama de Murcia ha sido el lugar elegido para celebrar la tercera edición del 'Encuentro Birdnet Murcia', el mayor encuentro de aficionados a ver aves de la Región, en una jornada para propiciar el intercambio de conocimiento y experiencias y compartir el entusiasmo y el amor por las aves. A lo largo del día, los más de 50 participantes detectaron hasta 75 especies de aves diferentes y pudieron participar además en un censo de cárabo.
Durante la reunión del pasado 21 de enero, impulsada por aficionados a la observación de aves de Birdnet Murcia en colaboración con las asociaciones Meles y Ulula, se visitó por la mañana la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de los Saladares del Guadalentín así como las lagunas de Alhama, y tras la comida, ya por la tarde, se realizó el censo de cárabo en el Parque Regional de Sierra Espuña.
La visita a los tres espacios permitió detectar al menos 75 especies diferentes. Aves que se registraron en la plataforma de ciencia ciudadana eBird contribuyendo al esfuerzo global para mapear la abundancia y presencia de aves en todo el planeta.
Algunas de las especies detectadas fueron invernantes escasos, con la escucha de un carricero común, la observación de un aguilucho papialbo o la de varios ejemplares de curruca tomillera. Se vieron asimismo anátidas en peligro crítico como el porrón pardo o en peligro como la malvasía cabeciblanca (fuente Libro Rojo de las Aves de España). Y una inesperada águila de Harris, rapaz originaria del continente americano utilizada en cetrería, que se le ha escapado a algún particular.
Censo de cárabo
También se avistaron rapaces nocturnas, como el cárabo común objetivo del censo que se realizó al ocaso en Sierra Espuña y en el que tuvieron la ocasión de participar algunos de los asistentesal 'III Encuentro Birdnetmurcia'.
El conocimiento de la situación del cárabo en el Parque Regional de Sierra Espuña es bastante deficiente, pues -excepto para el búho real- no se ha realizado ningún estudio en el interior del Parque desde hace al menos 20 años, explica Francisco Almansa, presidente de la asociación Meles.
El técnico repasa que se conocía que el cárabo común era abundante, y que el autillo y el mochuelo estaban presentes en ciertas áreas, aunque sin detalle sobre su distribución y abundancia. Más atrás en el tiempo, quizá hace unos 20 años, recuerda, se instaló un número indeterminado de cajas nido para cárabo "sin que se sepa su uso, eficacia y estado actual". Se consideró necesario avanzar en el conocimiento de la situación actual de las rapaces nocturnas en el interior del espacio protegido, por lo que se realizó un censo de estas especies en 11 valles del Parque Regional, que sirviera como referencia de la tendencia en el parque. Además, se realizó la revisión de algunas cajas de cárabo instaladas en el pasado, sin resultados positivos, y se realizó un taller junto a la asociación Ulula para hacer cajas de cárabo y otras aves rapaces. "Con estos objetivos, se avanza en el conocimiento a corto y medio plazo de esta especie nocturna protegida, se mejorará la disponibilidad de refugios de reproducción y se fomenta la educación ambiental mediante talleres de sensibilización", sostiene Almansa.
En ese contexto, la asociación Meles, en colaboración con la asociación Ulula y el P. R de Sierra Espuña, organizó el primer censo de cárabo Espuña en abril de 2021, repitiendo estos censos en abril y junio de 2021. Así se obtuvo presencia de la especie en 23 cuadriculas de 2,5 x 2,5 kilómetros, con una participación media de 30 personas por censo y casi 100 voluntarios en total, que recorrieron pistas y carreteras por cerca del 70% del parque.
Convivencia que sabe a poco
La jornada estuvo marcada por una participación de más de medio centenar de personas a lo largo del día. El intercambio entre diferentes generaciones de pajareros y una buena convivencia podría resumir un encuentro donde varios de los asistentes comentaban que se había quedado corto y que casi no les había dado tiempo a charlar con algunas personas.
Para Antonio Fuentes, pajarero y responsable de la actividad de seguimiento de aves marinas (RAM), resultó "un día muy bonico. La gente se ha ido muy a gusto y con ganas de más. Se ha echado de menos a los compañeros que no han podido asistir, y en vista del éxito de participación ya estamos dándole vueltas a la próxima edición. El Parque Regional de Calnegre y Cabo Cope podría ser el próximo lugar elegido para el encuentro y así facilitar el contacto con los compañeros del sur de la Región de Murcia y Almería", avanzaba.
Teresa de Miguel, pajarera de Albacete y colabora de la Sociedad Albacetense de Ornitología, contaba que era "una maravilla sentirme tan integrada entre tantos pajareros deseosos de pasar un día de convivencia haciendo lo que más nos gusta, ¡estar en el campo! Muy enriquecedora la mezcla de personas de distintas edades, profesiones, procedencias, gente empezando y otra con muchísima experiencia".
A Juan Nicolás, montañero y pajarero, le ha parecido "un encuentro muy interesante, la gente muy participativa y con ganas. Las primeras horas fueron muy buenas con bastantes observaciones de aves, me quedo muy satisfecho y volvería a repetir".
"Para mí, que soy de fuera, ha sido un día en el que he vuelto a comprobar que en Murcia me siento como en casa: rodeada de personas que te reciben con los brazos muy abiertos. No sé si tendrá algo que ver el hecho de provenir de una región donde también nos gusta decir "acho" y acompañar la comida con pimentón", bromeaba Carolina Rodríguez, pajarera de Badajoz que estudia actualmente un máster en la UMU; y que agregaba que "de lo que sí estoy segura es de lo mucho que disfruté del encuentro, gracias al ambiente tan enriquecedor que se generó mientras, indiferentes a nuestra edad, fuimos compartiendo lo que nos transmite descubrir la biodiversidad de nuestro entorno".
Fran García es coordinador del grupo de anillamiento de ANSE. En su opinión "fue una jornada estupenda, las aves acompañaron con creces tanto en la ruta de la mañana, en la que tuvimos algunas observaciones muy interesantes, como en el censo de la tarde que tuvo mucho éxito al menos en mi grupo. Una oportunidad de lujo para ponerle cara a muchos compañeros y compañeras de Birdnet Murcia y para compartir historias y experiencias".
Por mi parte, tras el parón de los últimos años motivado por la pandemia, eran muchos los compañeros con los que había comentado en actividades de censos, anillamientos o encuentros en el campo pajareando la posibilidad de retomar los encuentros entre pajareros que se habían iniciado en 2018 como homenaje a tres grandes ornitólogos que se han ido: Paco Rosique, Eloy Pérez y Richard Howard. Ha sido un día muy agradable compartiendo la pasión por las aves, saludando a amigos y amigas y poniendo cara a otros compañeros y compañeras a los que el campo aún no nos había cruzado.
Susana Noguera Hernández. Naturalista
2023-01-24