La Fundación Oceanogràfic y la Fundación Azul Marino soltaron ayer al mediodía en Benicasim tres tortugas curadas en las instalaciones del ARCA del Mar del Oceanogràfic, según informa la entidad en una nota de prensa.
Los animales habían sido rescatados gracias a la concienciación de los pescadores del litoral valenciano, a la coordinación del 112 y a la acción de la Red de Varamientos de la CV compuesta por la Conselleria de Emergència Climàtica i Transició Ecologìsta, Universitat de València y Fundación Oceanogràfic.
La tortuga registrada con el número 525, de unos 56 kilos, fue capturada accidentalmente por arrastre en Benicarló e ingresó en el ARCA del mar presentando una embolia gaseosa severa gracias a la colaboración de la embarcación Princess.
La número 570 (12,5 kilos) también fue recogida accidentalmente en Burriana. Gracias a la colaboración de la embarcación Simar ingresó en el ARCA del Mar con embolia gaseosa leve y aspiración.
Finalmente, la número 579, de nueve kilos, fue recuperada por la embarcación El Mareny y no se le detectó ninguna alteración, ni durante las pruebas ni durante el periodo de observación.
Dentro del convenio de colaboración entre ambas fundaciones, miembros de ambas instituciones explicaron en la playa Voramar, a los voluntarios y otras personas que se unieron en torno a la suelta, la actividad de una y otra entidad, así como el valor que representa poder devolver a su medio natural a los quelonios, que han sufrido las adversidades del mar.
Las tortugas fueron “bautizadas” antes de entrar al mar como Voramar -la más grande-, Esperanza y Marina.
El acto protagonizado por el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, la vicealcaldesa de la localidad, Cristina Fernández, y la concejala de Playas, Elena Llobell, y en él también estuvieron presentes dos representantes de la Cruz Roja, Sílvia Delatorre y Cristina Barreda y el dueño del hotel Voramar, Rafa Pallarés.
2021-04-10
La tortuga Voramar, con 56 kilos, vuelve al mar. Imagen: Oceanogràfic.
Los asistentes aprendieron sobre los quelonios antes de su suelta. Imagen: Oceanogràfic.
