La asociación alemana CommiteeAgainstBirdsSlaughter (CABS), GER-Ecologistes en Acció y Gecen han constatado este año la existencia de alrededor de 100 puestos de liga (o parany) activos en la Comunidad Valenciana en un ejercicio más en el que afrontan la detección y denuncia de paranys activos y enfilats en la región, según informan en una nota de prensa conjunta en la que lamentan que "la ineficacia en el control por parte de la Conselleria y la Guardia Civil impide su disminución".
La liga o parany es un método ilegal de captura de aves que consiste en untar con pegamento unos árboles o ramas para que las presas queden atrapadas. Es un método cruel, en el que las aves luchan por liberarse produciéndose heridas de diversa gravedad, y no es selectivo, ya que pueden quedar atrapadas distintas especies, algunas de ellas protegidas.
El enfilat, también ilegal, consiste en levantar una serie de redes abatibles y atraer a las aves mediante reclamos.
Del centenar de casos de uso de liga hallados en la Comunidad, unos 80 estaban en las comarcas de Castellón. Para las ONG medioambientales, es especialmente grave la comisión del delito en las comarcas del norte de la Comunidad, donde persisten alrededor de 40 paranys.
El otro punto caliente, apuntan, lo constituyen los paranys en fincas valladas, como en Onda y municipios limítrofes, donde el acceso es más complicado y la eficacia de las autoridades se resiente. Así, advierten de que unos 30 paranys intentan blindarse con limitación de acceso y utilización de perros como “alarma” ante la llegada de los agentes.
La ubicación de los paranys activos, grabaciones y demás actuaciones son puestas a disposición de los agentes para que inicien sus actuaciones. "Pedimos, un año más, una mayor implicación de los cuerpos y fuerzas de seguridad. Es absolutamente necesaria una actuación estructurada, planificada y rigurosa que cuente con los medios suficientes para evitar que se siga cometiendo impunemente un delito tipificado en el Código Penal con graves consecuencias para la biodiversidad", exponen en el escrito.
Además, advierten de que las redes abatibles, llamadas enfilat, usadas para la caza de fringílidos, sigue siendo un método delictivo utilizado fundamentalmente en la Plana Baja, una comarca de la Comunidad Valenciana situada en la costa sur de la provincia de Castellón (Plana Baixa). Unas 40 instalaciones de este tipo continúan activos en esta zona, siendo un punto negro en la ruta migratoria de las aves. Una parte significativa de los mismos han sido denunciados tras ser sorprendidos cometiendo el delito in situ.
"El furtivismo persiste en las comarcas de Castellón, reinventándose según las circunstancias y la presión ejercidas", destacan en el texto, en el que detallan que el uso de terrazas en edificios de zonas periféricas de los cascos urbanos para la caza con reclamo y liga, o la utilización de reclamos electrónicos en enfilats abandonados para, una vez atraídas las aves, proceder a su caza con escopeta, "están entre las lamentables novedades delictivas que sustituyen a los clásicos paranys y enfilats". Y lo mismo ocurre con las redes japonesas, que también están sustituyendo poco a poco a los paranys por su facilidad a la hora tanto de ser colocadas como retiradas.
2020-10-26
Un enfilat activo, en Plana Baixa. Imagen: CABS.
Varias aves capturadas de forma ilegal por estos medios. Imagen: CABS.
Redes japonesas junto a paranys en sustitución de éstos, denunciadas la semana pasada. Imagen: CABS.
