Es inusual que suceda, pero estamos en fechas de nacimiento de tortugas marinas, y si este verano alguna hembra salió del mar a desovar sin ser vista por los numerosos voluntarios medioambientales de 'Alerta tortuga' ni por algún veraneante distraído, excavó un nido y depositó sus huevos, ahora es tiempo de que las pequeñas tortuguitas nazcan.
Por ejemplo, del nido de tortuga boba (Caretta caretta) ubicado en Mar Bella (Barcelona) salieron a finales de agosto 55 crías, que emergieron naturalmente. El evento ha sido un éxito, ya que la puesta contenía 60 huevos.
Por lo que nos toca, los huevos del nido que aún reposa en la Región de Murcia están a punto de eclosionar, si no lo han hecho ya.
Pero, además, si otras tortugas desovaron y no fueron localizados ni su nido ni sus rastros -el confinamiento ha hecho que hubiera menos gente en el exterrior y la marea o el viento borraran sus rastros-, pudiera ocurrir que, una de estas noches, en algún punto de la costa regional, la arena comenzara como a hervir y del fondo surgieran los pequeños quelonios llenos de ímpetu por alcanzar la orilla del mar.
Es fundamental en estas fechas que las máquinas limpiadoras de arena no dejen ondulaciones que se convierten, para los pequeños animales, en obstáculos insalvables. Tampoco debemos hacerlo nosotros, los visitantes de las playas.
Y si somos testigos de un acontecimiento tan excepcional como relevante, avisamos sin tardar al 112 y supervisamos a los animales, sin molestar -nada de fotos con flash-, en su recorrido hacia su nueva vida en alta mar, donde comenzará una larga época en la que apenas se sabe nada de ellas -conocida como 'los años perdidos'-. Cuando lleguen a adultas y reproductores, machos y hembras se encontrarán en el agua, frente a la playa, y sólo ellas volverán a la arena, a la misma arena que las vio nacer, a desovar.
Así pues, ¡atentos y suerte!
NOTA: en cuanto al nido de Barcelona, y según informan tanto desde Caretta a la Vista como desde la Fundación CRAM, la siguiente noche nacieron otras 10 tortugas que fueron a mar. A la mañana siguiente se procedió a exhumar el nido junto con las técnicas de 'Caretta a la Vista' y se pudo rescatar a una tortuguita más, a 20 centímetros de profundidad, sola y con muy pocas opciones de haber salido por sí misma. También se hallaron cuatro huevos no eclosionados, de los que dos tenían un embrión desarrollado pero que había muerto hace tiempo y los otros dos se mostraban sin embrión aparente. Además, también han nacido los 9 huevos que estaban incubándose artificialmente en CRAM.
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Mónica Rubio. Periodista y Bióloga
2020-09-04