Tres de las principales instituciones zoológicas de Europa -Tierpark Hagenbeck, de Alemania; Pairi Daiza, de Bélgica; y Oceanogràfic, de España-, han llegado a un acuerdo para desarrollar un programa de reproducción y conservación de morsas único en Europa que asegure a largo plazo la reproducción ex situ de esta especie.

Durante los últimos tres años el Oceanogràfic de la Ciutat de les Arts i les Ciències, en coordinación con los otros dos zoos europeos, ha diseñado un programa de intercambio único, que empieza por llevar los tres ejemplares del acuario valenciano hasta el zoo alemán en busca de su apareamiento con el único macho probado que actualmente reside en Europa, con la finalidad de contribuir a la conservación de la especie.

Con ello se pretende consolidar a nivel mundial, junto a las escasas instituciones que mantienen morsas en Norte América y Asia, la viabilidad genética y social de las poblaciones, que se mantienen en centros zoológicos, contribuyendo así a satisfacer la totalidad de necesidades fisiológicas y etológicas –comportamentales– de estos animales y, como resultado, a generar conocimiento que permita la implantación de programas de conservación en sus hábitats naturales.

Las tres morsas del Oceanogràfic -donde han vivido durante 15 años-, que ya han alcanzado su madurez sexual, se han enviado, en primer lugar, al centro de Hamburgo para pasar su periodo de celo entre enero y marzo. Posteriormente, se trasladarán a la nueva instalación en Pairi Daiza, donde se integrarán en el definitivo programa de reproducción en convivencia con más ejemplares de su especie y de distinto sexo durante al menos diez años.

El diseño del área donde estarán en Pairi Daiza se ha realizado con la colaboración y supervisión de los expertos del Oceanogràfic, que se han asegurado de que Tanya, Ninotchka y Petruska encuentren allí un hogar óptimo, incluso en unas instalaciones más modernas y de mayor espacio que en València.

La concepción de su nuevo hábitat se ha desarrollado a partir de un proyecto en el que ha participado un equipo internacional multidisciplinar que ha garantizado tanto la alta calidad de sus acabados y naturalización, como el cumplimiento de los más exigentes estándares, que establecen los grupos especializados de la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA), Asociación Europea de Mamíferos Acuáticos (EAAM), Asociación de Zoos y Acuarios (AZA) y la Asociación Mundial de Zoos y Acuarios (WAZA).

Con el mismo cuidado y los mismos cuidadores

Con el fin de preservar su bienestar, los cuidadores que en este momento se ocupan de las morsas en València estarán con ellas tanto en Hamburgo como en Bélgica, para conseguir con éxito el proceso de adaptación.

Además de ello, lo más importante es que los animales continuarán, tanto en Alemania como en Bélgica, siendo propiedad del Oceanogràfic y se garantizará que se cumplan los planes de enriquecimiento ambiental, alimentación y tratamiento veterinario, que llevan actualmente y que han sido diseñados por el Comité de Bienestar Animal del Oceanogràfic.

Tras haber logrado con éxito el avance en el conocimiento de estos animales árticos, gracias al extenso programa de investigación de la Fundación Oceanogràfic, el compromiso de cara a su traslado a su nueva residencia es el de continuar estudiando en estos ejemplares los aspectos más relevantes para la conservación de las poblaciones en el medio natural.

2019-12-20

  • Tanya, Ninotchka y Petruska, las tres morsas del Oceanogràfic que participan en el programa de reproducción y conservación de la especie único en Europa. Imagen: Oceanogràfic
    Tanya, Ninotchka y Petruska, las tres morsas del Oceanogràfic que participan en el programa de reproducción y conservación de la especie único en Europa. Imagen: Oceanogràfic.