Una apuesta por las rapaces para el control biológico del topillo triunfa en un pueblo burgalés

Desde 2016 el municipio de Villafruela (Burgos) ha apostado, entre otras acciones, por el control biológico de las plagas de topillo campesino mediante el fomento de la reproducción de pequeñas aves rapaces depredadoras de roedores, según informa en una nota de prensa de la asociación de conservación de la naturaleza Grefa, entidad que está guiando las actuaciones.

Así, y en el marco del 'Proyecto de conservación ambiental y restauración integral de ecosistemas agrarios intensificados', desarrollado por Grefa, en los casi tres años de colaboración se han colocado ya unas cien cajas nido para especies como el cernícalo vulgar, la lechuza común y el mochuelo europeo.

Otro logro del proyecto ha sido la plantación de un millar de árboles y arbustos autóctonos, con el objetivo de crear corredores naturales e "islas" ecológicas entre los extensos cultivos agrícolas de la zona.

El acondicionamiento de varias charcas naturales, la recuperación ambiental de antiguas escombreras, la celebración de jornadas formativas, charlas divulgativas y un campo de trabajo para voluntarios y la colocación de nidales para pequeñas aves insectívoras y murciélagos son otras medidas realizadas en virtud de la colaboración entre Grefa y Villafruela. 

Este trabajo conjunto ha sido merecedor de la concesión, por parte de la Diputación Provincial de Burgos, de uno de los Premios Provinciales de Medio Ambiente de la convocatoria de 2018, en reconocimiento al trabajo desarrollado en Villafruela en favor de la conservación de la biodiversidad. El premio fue entregado el pasado 29 de septiembre y consistió en un diploma y una dotación económica de 7.500 euros para el Ayuntamiento de Villafruela. "La categoría en la que ha sido premiado el municipio de Villafruela es la de Calidad Ambiental, lo que representa una merecida recompensa al trabajo en defensa del medioambiente que se viene desarrollando en este pueblo burgalés", explica Carlos Cuéllar, responsable del proyecto de control biológico de Grefa y coordinador de los trabajos de esta ONG en Villafruela.

En 2016, Villafruela ya había obtenido el premio Fuentes Claras a Pequeños Municipios por la Sostenibilidad Ambiental otorgado por la Junta de Castilla y León.

De todas las actuaciones que han merecido la concesión de estos premios "sin duda el proyecto estrella dentro de esta alianza en favor de la biodiversidad tan fructífera entre un municipio y una ONG ha sido el mencionado control biológico de las plagas de topillo campesino, a través de métodos no agresivos para el medio ambiente, con el objetivo de impedir los daños que este roedor causa a la agricultura", apunta el texto. 

Cálida acogida en el pueblo

"Es de agradecer la cálida acogida que Grefa y nuestro proyecto de control biológico ha recibido por parte del Ayuntamiento de Villafruela y de los propios vecinos, abiertos a implantar nuevas acciones que generasen biodiversidad y actividad en el municipio, algo que se ha conseguido con creces", afirma Cuéllar, quien añade que "proyectos de estas características necesitan siempre de la aceptación local para llevarlos a cabo, por lo que desde el primer momento hemos buscado la implicación de los habitantes de Villafruela y de sectores tan activos en el medio rural como agricultores y cazadores". 

De hecho, el 'Proyecto de conservación ambiental y restauración integral de ecosistemas agrarios intensificados', se ha podido llevar a cabo con el apoyo de numerosas entidades públicas y privadas, así como la colaboración de voluntarios y estudiantes, tanto locales como del resto de España.

Según Grefa, Villafruela está en el mejor camino para "consolidarse como un municipio ejemplar en el impulso al medio ambiente, de manera que su experiencia puede ser extrapolable a otros municipios de características similares interesados en alcanzar la compatibilidad entre la producción agraria y la biodiversidad".

2018-10-19