Por primera vez, tres proyectos LIFE de conservación del oso pardo, junto a organizaciones que trabajan en el ámbito de la educación ambiental, han decidido poner en común y de forma permanente materiales y propuestas con el objetivo de mejorar la eficacia de los resultados de sus respectivos programas educativos, según apunta la Fundación Oso Pardo en una nota de prensa. La idea es crear una plataforma digital en la que cada participante aportará sus herramientas y estrategias, y en la que se podrá acceder a los materiales de los demás miembros. La plataforma servirá, asimismo, de canal permanente de comunicación y estímulo a la innovación de ideas que den continuidad a la red con posibles proyectos futuros.
En concreto, los participantes son el Programa PirosLife Catalunya (gestionado por la Generalitat de Catalunya, y cuenta como socios al Conselh Generau d´Aran, a la Universitat de Lleida y a la Fundación Oso Pardo), el Programa Life Oso Courel (gestionado por la Fundación Oso Pardo, y cuenta como socios a la Xunta de Galicia y a la Asociación Galega de Custodia del Territorio), y el Programa Life Natura 2000 + Oso (gestionado por la Fundación Oso Pardo y que cuenta como socia con la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León). Además, se han sumado al trabajo en red la Fundación Oso de Asturias (FOA) y el Centro de Investigación del Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria (CIMA), que cuentan también con una larga trayectoria en educación ambiental.
En conjunto, el trabajo de las instituciones y organizaciones participantes abarca la totalidad del área de distribución de la especie en la Cordillera Cantábrica y los Pirineos.
Los miembros de la red, que se reunieron recientemente en el seminario 'Educación Ambiental y Territorio Oso', organizado por la Fundación Oso Pardo (FOP) y la Universitat de Lleida, coinciden en la necesidad de abordar un amplio trabajo de seguimiento de resultados de los distintos programas y diseñar una serie de indicadores comunes que sirvan para evaluar el impacto real que estos tienen sobre la sociedad.
La jornada ha servido para experimentar un primer intercambio de los materiales que más éxito tienen entre los escolares: alfombras con huellas y siluetas para comparar su tamaño con el de los osos, cuentos con olores, bolsas de distintos tactos de piel y pelo… “la intención es despertar los sentidos y la curiosidad”, han explicado los formadores del PirosLife.
“La educación ambiental con los escolares es la mejor inversión de futuro porque ellos tomarán las decisiones dentro de 25 ó 30 años”, defiende Sofía Isus, profesora de la Universitat de Lleida, quien añade que “el principal reto que nos encontramos es el de hacerles entender que habitamos en un espacio compartido con otras especies. Hemos vivido muchos años con la idea imperante de que el hombre es el centro y dueño de la naturaleza y esta mentalidad tiene que cambiar. Además, hay que aprovechar que los niños ejercen, a su vez, de educadores de los padres”, ha señalado.
El presidente de la FOP, Guillermo Palomero, destaca que “los adultos son igualmente un objetivo muy importante de la información ambiental, con colectivos clave como los cazadores o los agentes de desarrollo rural. Resulta sorprendente que en la sociedad de la comunicación sigan existiendo mitos sobre el oso, cuando tenemos ejemplos tan positivos de convivencia con el animal como el del Parque Natural de Somiedo”, sostiene.
2017-09-15
