La asociación Proyecto Gran Simio ha registrado una petición en el Parlamento Europeo para que los grandes simios (bonobos, orangutanes, chimpancés y gorilas) sean considerados por la Unesco como Patrimonios Vivos de la Humanidad. La entidad avala esta solicitud con más de 600 cartas firmadas por personas relevantes en diversos campos de la ciencia, escritores, académicos y políticos, que consideran además a los grandes simios como personas no humanas.

Por el momento, la petición ha sido admitida a estudio por la Comisión de Peticiones, que tendrá que analizarla y decidir si acepta que la instancia puede seguir sus trámites en el Parlamento Europeo. La Comisión suele tardar alrededor de un año en resolver esta cuestión. Una vez resuelta, si la admite a trámite se la pasa a los organismos especializados que considera más adecuados para su información y toma de decisiones, que en este caso serían la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria y el Intergrupo sobre el Bienestar y la Conservación de los Animales.

Además, al mismo tiempo Proyecto Gran Simio ha lanzado en change.org una campaña de recogida de firmas con esta misma demanda, en la que hasta la fecha han firmado más de 2.000 personas.

Pedro Pozas Terrados, director ejecutivo del Proyecto Gran Simio (GAP/PGS-España), defiende que "las poblaciones los grandes simios en libertad tienen que ser protegidas, y los que se encuentren cautivos tienen que ser trasladados a santuarios donde puedan vivir en paz lo que les quede de su existencia. La explotación abusiva a la que son sometidos los grandes simios debe acabar, y la Unesco ofrece una herramienta imprescindible para su protección”.

El técnico apunta que "la declaración de los Grandes Simios como Patrimonios Vivos de la Humanidad supondría una herramienta de gran valor para conservar las poblaciones existentes en libertad", pero también un gesto con el que "reconocer, de una vez por todas, que ellos y nosotros tenemos un mismo ancestro común, un mismo tronco; que nacimos de un mismo ser y emprendimos caminos paralelos pero siempre juntos. La Unesco tiene la obligación, por el respeto a la vida y a la historia de la humanidad, de protegerlos y otorgarles el apoyo que se merecen para su supervivencia".

Según estima Pozas, esta declaración conllevaría beneficios para los grandes simios en tanto que aumentaría la protección de las poblaciones en libertad así como la salvaguarda de su hábitat y, por consiguiente, de las selvas tropicales donde habitan, "poniendo fin a la explotación de los recursos naturales y la deforestación".

Pero Pozas destaca también mejoras para el ser humano, ya que se promovería "la protección de las poblaciones locales e indígenas que habitan en zonas donde campean también los grandes simios" y supondría además, un "apoyo a estas poblaciones en la conservación y protección de los grandes simios".

Asimismo, con este reconocimiento se conseguirían "mejores condiciones y más dignas para todos aquellos grandes simios que se encuentran en cautividad" al tiempo que ayudaría a "incentivar la construcción de santuarios donde puedan ser llevados los cautivos y puedan vivir en paz sin que ningún ser humano influya en sus vidas hasta el fin de su existencia".

En este sentido, detalla que la nueva situación conllevaría "el fin de los traslados continuados a los que son sometidos los grandes simios en todos los zoológicos, rallando incluso en algunas ocasiones explotaciones sexuales de los mismos al objeto de tener bebes que nacen entre rejas", y llevaría consigo igualmente "el fin de los Programas de Especies en Peligro de extinción con los grandes simios en los zoológicos ya que jamás se ha reintroducido a ninguno de ellos, o solo se mueven por intereses no muy claros". "Donde hay que actuar para evitar su extinción es en la protección de las poblaciones en libertad in situ”, reivindica Pozas. En su opinión, provocaría también "el fin de la experimentación con grandes simios en todas las naciones del mundo" y traería "la prohibición total de espectáculos circenses o circos donde son utilizados en contra de su voluntad para divertimiento de los humanos".

Por último, el técnico añade que el respaldo de la Unesco serviría de "apoyo indispensable para formular leyes de protección y leyes de los grandes simios, sin que puedan quedar archivadas por los políticos" y sería "una herramienta indispensable para que las Naciones Unidas puedan formular una Declaración de los Derechos de los Grandes Simios".

Ley de Protección Animal

Por otra parte, la asociación ha informado de que la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha admitido a trámite, tras un año, otra petición de la misma entidad, dirigida a la creación de una Ley de Protección Animal, que de este modo pasa ahora a ser estudiada por los especialistas. En su respuesta, la Comisión señala que procede su admisión a trámite "por tratarse un asunto que incide en el ámbito de actividades de la Unión Europea”. En vista de ello, la asociación ha hecho saber a la Comisión Europea que se necesita una Directiva General de Protección Animal que incluya numerosos aspectos, como medidas de protección a los animales que se encuentran en los zoológicos, prohibición de circos con animales, espectáculos circenses, fiestas donde exista maltrato a animales, etc.".

“Proyecto Gran Simio seguirá luchando en todas las instituciones del Estado y Europeas por la protección de todos los animales y el cese de la explotación a seres vivos sintientes que deben tener derechos básicos fundamentales", apunta Pozas. En este sentido, detalla que "es necesaria una Ley de protección Animal que pueda regular en el ámbito europeo el trato a los seres vivos debido a que cada país tiene sus normativas propias, y en algunos, como en España, no existe una Ley nacional donde los ciudadanos podamos acudir ante el maltrato de seres sintientes no humanos”.

(NOTA: crédito de todas las fotografías: Jeff McCurry / Proyecto Gran Simio-España).