La Plaza de Europa de Murcia cuenta desde ayer con un jardín vertical efímero, elaborado con materiales reciclables y formado por más de 1.000 plantas, flores y especies aromáticas.
Esta escultura floral ecológica se mantendrá a lo largo de toda esta semana, tras la cual sus macetas se entregarán a los propios vecinos para que puedan plantarlas en la tierra.
Para reforzar su carácter sostenible, dispone además de iluminación nocturna de consumo mínimo.
La instalación de este jardín vertical se suma a los monumentos florales que están engalanando las plazas y jardines de Murcia durante estas fiestas, dentro de la iniciativa Jardines de Primavera del Ayuntamiento de Murcia, y se enmarca a su vez dentro de la experiencia de participación social denominada ADN Urbano, un proyecto con el que los propios murcianos materializan la visión que quieren de su barrio, con acciones transformadoras y distintivas del carácter e idiosincrasia de su vecindario, según indica el Ayuntamiento de Murcia en una nota de prensa.
Así, los vecinos pueden diseñar la nueva distribución de las zonas verdes, arbolado, mobiliario urbano y zonas infantiles. Para ello, pueden contemplar la plaza a vista de pájaro precisamente desde lo alto del jardín vertical, y reconfigurar dicho espacio público a través de una aplicación electrónica (que también puede descargarse en Google Play, bajo el nombre ‘Citying Urban Players’). Cada parte de la plaza, que se ha dividido en módulos, puede personalizarse y destinarse a un uso concreto.
La Plaza de Europa será la primera de la ciudad de Murcia que será diseñada íntegramente por los vecinos.
Por nuestra parte, añadir que en elclickverde nos gustan los jardines, o muros verticales, que por cierto cada vez más se instalan en las paredes de los edificios. De hecho, en Murcia hay varios bonitos ejemplos de ello, no hay más que levantar un poco la vista y fijarse en las fachadas a cierta altura.
Y nos gustan por sus innumerables beneficios: generan oxígeno, atrapan polvo y metales pesados a la vez que filtran gases nocivos, hacen descender la temperatura en verano y amortiguan los fríos del invierno, reducen los niveles de ruido que llegan al interior de los edificios, no ocupan nuevo espacio, no hay que tratar las malas hierbas -con lo que ello puede suponer de sustancias tóxicas-, reducen el efecto de isla de calor de las ciudades, aportan un valor estético a las fachadas y, además, su vista es reconfortante para los ciudadanos, tanto de cara al trabajo como para el quehacer diario.
Así que nos gusta también cualquier iniciativa que divulgue y fomente el uso de los muros, paredes o jardines verticales en las ciudades.
2017-04-20
El alcalde, Ballesta, presentando ayer el jardín vertical de Santa Eulalia.
