La XXXI Campaña Antártica española, que comenzará a finales de este año, contará en esta edición con nuevas instalaciones gracias a la reciente remodelación de la Base Juan Carlos I, uno de los dos emplazamientos españoles en la helada superficie austral. Los nuevos módulos de la base permiten casi duplicar su capacidad, hasta las 50 personas, y aumentar el espacio disponible para el personal científico en los laboratorios y las zonas comunes, según una nota de prensa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Estas obras han supuesto un importante esfuerzo medioambiental y logístico. En concreto, el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad ha aportado 13 de los 16 millones de euros que ha costado la remodelación, y el CSIC, que gestiona la base, ha contribuido con los 3 millones restantes.
Además, durante esta campaña también se estrenará un nuevo módulo de almacén en la Base Antártica Gabriel de Castilla, que amplía las capacidades de la base.
España cuenta con dos emplazamientos en la Antártida y un buque para desarrollar investigaciones científicas en la zona. Uno de los emplazamientos es la Base Antártica Española Juan Carlos I, situada en la Isla Livingston y gestionada por la Unidad de Tecnología Marina del CSIC, desde donde se coordina la logística general de la campaña antártica. Además, el Ejército de Tierra gestiona la Base Antártica Española Gabriel de Castilla, en la Isla Decepción, mientras que la Armada opera el Buque de Investigación Oceanográfica Hespérides. Tanto el Buque de Investigación Oceanográfica Hespérides como las bases antárticas forman parte del mapa español de Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares, instalaciones, recursos o servicios excepcionales en su género, cuya importancia y carácter estratégico justifica su disponibilidad para todo el colectivo de I+D+i.
En el marco de la campaña, en la que participarán 230 personas, de las que 122 son científicos, este año se llevarán a cabo 16 proyectos de investigación, dos de los cuales se desarrollan a bordo del buque de investigación oceanográfica Hespérides, que partirá en las próximas semanas desde la base de Cartagena (Región de Murcia) hacia la Antártida.
Adicionalmente, se dará apoyo a cinco proyectos de Alemania, Austria, Bélgica, Colombia y Portugal.
La Campaña Antártica, indica la nota, constituye un modelo de cooperación entre diferentes instituciones públicas y privadas al servicio de la I+D+i en el marco del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación. “La Antártida es un laboratorio natural debido a la ausencia de huella humana. Debido a su aislamiento, este observatorio privilegiado permite estudiar procesos geológicos, biológicos, oceanográficos y atmosféricos, que son críticos para el conocimiento del sistema global”, explica Andrés Barbosa, investigador del CSIC y gestor del programa de Investigación Polar en la Base Antártica Española Juan Carlos I.
El Ministerio de Economía, Industria y Competitividad ha destinado 8,7 millones de euros para garantizar la operatividad logística y la apertura de las bases antárticas, y la Agencia Estatal de Investigación financia con 1,2 millones de euros la realización de los proyectos científicos. A su vez, el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad financia los proyectos que se realizan tanto en las bases antárticas como a bordo del buque Hespérides –a través del subprograma de Investigación Polar de la Agencia Estatal de Investigación–. Además, a través del Comité Polar, coordina las actividades que los diferentes organismos desarrollan durante las campañas.
Esta campaña acogerá 16 proyectos de investigación que desarrollarán las siguientes entidades: Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra; Instituto Geológico y Minero de España, Universitat Ramón Llull, Universidad de Alcalá de Henares, Universidad Politécnica de Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, Instituto de Diagnóstico Ambiental y de Estudios del Agua (CSIC), Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), Universidad Complutense de Madrid, Universidad de Oviedo, Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera (CSIC), Universidad de Granada, Universitat de Barcelona, Centro de Astrobiología (INTA-CSIC) e Instituto Hidrográfico de La Marina.
2017-11-01
