La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local-Unidron de Telde (Gran Canaria), ha procedido a la detención de un hombre por supuestos delitos relativos a la protección de la flora, fauna y animales domésticos y otro contra la seguridad colectiva por la tenencia ilegal de animales, según informa el cuerpo de seguridad en una nota de prensa.
La detención ha tenido lugar en el marco de la operación Naja-Gc y se han intervenido 53 especímenes protegidos y venenosos sujetos al Convenio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (Cites).
Los animales intervenidos proceden de los continentes de América, África, Asia y Oceanía estando todos ellos protegidos por el Convenio Cites, Apéndices I, II y III y Reglamento CE n.º 338/97, los cuales están en peligro de extinción y vulnerables, considerados especies protegidas de fauna silvestre.
Durante el registro judicial en el domicilio del detenido se constató la existencia de instalaciones para albergar las distintas especies; tres acuaterrarios de grandes dimensiones, 40 terrarios y dos estancias acondicionadas para la cría de roedores y dos primates, poniendo en peligro la vida, la integridad física o la salud de las personas, al encontrarse en zona urbana residencial.
La investigación comenzó a finales de año 2021 por el SEPRONA tras obtener información sobre los hechos y posterior apoyo de la UNIDRON realizándose vuelo con drones donde se constató la existencia de un caimán de grandes dimensiones en la parte superior de la edificación. A su vez, se pudo acreditar la vinculación del ahora detenido con otra persona con antecedentes policiales por supuestos delitos de tráfico de especies, contrabando, falsificación documental y pertenencia a grupo criminal. También se ha verificado que el detenido posee los conocimientos necesarios para el mantenimiento de reptiles venenosos y peligrosos.
Animales venenosos y peligrosos
Entre los animales aprehendidos en poder del investigado se identifican las siguientes especies: una tortuga aligátor, un monstruo de gila, un lagarto cocodrilo chino, varias especies de caimanes (uno de cabeza ancha, dos de Cuvier), un cocodrilo enano africano, dos pitones reticular, una tarántula chilena y una de patas rojas, varias especies de cobra (una real, una de filipinas, una monóculo albina, una del cabo, una escupidora), varias especies de víboras (una de Gabón, una cornuda de las arenas), dos serpientes de cascabel, una mamba verde occidental, varias especies de varanos (uno filipino, uno azul, uno panoptes, uno del nilo, dos reisingeri, dos lelinus, dos prasinus), dos pogonas vitticeps, una tilicua scincoides, una iguana cornuda, once serpientes real de california, dos titis de pincel negro, insectos y roedores.
De los citados animales se significa que estos están afectos al convenio Cites, de los cuales 12 especímenes son venenosos con posibilidad de causar la muerte por inoculación de toxinas, producir lesiones graves, poner en peligro la vida por traumatismos o transmisión de enfermedades, acreditándose que a nivel sanitario, no existe ni protocolo de actuación ni antídoto específico por agresiones por reptiles venenosos en los centros hospitalarios en Gran Canaria.
Por otro lado, la tenencia de estos animales además puede ser un grave peligro para la biodiversidad y que la liberación de forma incontrolada de estos especímenes no autóctonos en el medio natural de la isla de Gran Canaria podrían ocasionar un peligro al equilibrio natural.
Estos especímenes han quedado depositados en el centro de rescate animal Cocodrilos Park para proporcionarle los cuidados necesarios mientras estén a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Telde, Las Palmas.
La investigación realizada por el Seprona de Las Palmas ha revelado una de las colecciones privadas de especímenes venenosos más importante a nivel nacional y europeo. El presunto autor de los hechos ha quedado a disposición judicial dictando medidas cautelares al efecto.
Durante la investigación, los agentes del Seprona han contado con la colaboración de la Policía Local de Telde (Unidron), la usecic y Policía Judicial (Edite) de la Guardia CIvil, Autoridad Científica Cites del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España (Miteco), Dirección General de Ganadería del Gobierno de Canarias, Veterinaria Municipal del Ayuntamiento de Agüimes, personal de Cocodrilo Park y de la Fundación Neotrópico de la isla de Tenerife.
Operación Thunder
Esta operación policial realizada por agentes del Seprona de Las Palmas vienen encuadrada en el marco de una operación coordinada a nivel mundial contra el tráfico de especies, Operación Thunder, donde incluso es la primera vez que en la ejecución de este tipo de actuaciones se pone en marcha la Unidad Canina de detección de especímenes Cites de la Guardia Civil.
En la citada operación, coordinada a nivel mundial por Interpol, se ha detenido e investigado a 61 personas por tráfico de especies protegidas, delitos contra la flora y la fauna, delitos relacionados con el incumplimiento del Convenio Cites y de la normativa de contrabando y falsedad documental. Así mismo se han aprehendido 978 especímenes de especies protegidas. También se han realizado más de 2000 inspecciones en núcleos zoológicos, anticuarios, puertos y aeropuertos.
La primera fase se ha orientado al tráfico de maderas protegidas, llevándose a cabo un total de 816 inspecciones. La mayoría de infracciones administrativas detectadas han sido en el marco de la Ley de Montes, especialmente en lo que se refiere al incumplimiento del Reglamento que regula el comercio de maderas a nivel europeo (Reglamento 995/2010, EUTR). Entre las actuaciones de más relevancia, cabe destacar la intervención de dos contenedores que contenían madera protegida proveniente de Gambia y con destino China, por incumplir distintas regulaciones (reglamentos europeos y/o convenios internacionales). Las especies de madera detectadas se encuentran estrictamente protegidas por el Convenio sobre el Tráfico Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites), que regula su tráfico internacional por encontrarse en una situación de amenaza. Por ello se procedió a la inmovilización de las mismas, iniciándose investigaciones que se encuentran aún en curso.
Tráfico de Especies Protegidas
El tráfico ilegal y furtivismo de especies silvestres, constituye una de las mayores amenazas para la biodiversidad a nivel mundial. La Unión Europea aprobó el Plan de Acción europeo para combatir el tráfico ilegal y el furtivismo internacional de estas especies silvestres, adaptado en España para aplicar las medidas oportunas (Plan Tifies), en respuesta al llamamiento realizado por la ONU para combatir esta problemática. Esto ha supuesto un importante reto en el ámbito de la conservación de la naturaleza a nivel mundial, que pretende contribuir a acabar con este tipo de actividades ilegales.
Esta operación se enmarca dentro del Plan de acción español contra el Tráfico Ilegal y el Furtivismo Internacional de Especies Silvestres (Plan TIFIES), y del proyecto LIFE Guardianes de la Naturaleza.
2022-02-28