El clima determina el tipo de redes tróficas que se establecen en la naturaleza, y las actividades humanas las empobrecen, según advierte en una nota de prensa el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC), que hace referencia a un estudio en el que han participado investigadores de la entidad y que ha analizado la distribución geográfica y preferencias alimenticias de todos los mamíferos terrestres de gran talla del planeta.

A partir de su trabajo, los autores encontraron que las comunidades se agrupan en seis tipos, en función de cómo son sus redes tróficas. La investigación muestra cómo varía la organización trófica de las comunidades en función del clima, así como el efecto que las actividades humanas tienen sobre dicha organización. Por ello, este estudio ayudará a predecir los efectos del cambio global sobre las comunidades biológicas.

El clima tiene un papel importante en la distribución de las especies, pero se sabe poco de su efecto sobre las interacciones entre los organismos que conviven en un mismo lugar. El estudio se centra en una de las formas más importantes de interacción entre los seres vivos: la alimentación. «Con la ayuda del agua y los nutrientes del suelo, las plantas transforman la energía que les llega del sol en distintos recursos vegetales, tales como hojas o semillas. Esa biomasa vegetal sirve de alimento a distintos tipos de consumidores, tales como folívoros o granívoros. La hipótesis de partida es que la cantidad de energía disponible en cada región, determinada por el clima, restringe el tipo de redes tróficas que pueden existir. El resultado fue sorprendentemente claro», afirma Miguel B. Araújo, investigador del MNCN.

«Analizamos las distribuciones geográficas y preferencias alimenticias de todos los mamíferos terrestres con un peso mayor de tres kilogramos y encontramos que se agrupan en comunidades que, en función del clima en el que se encuentren, tienen un tipo u otro de organización trófica», explica Manuel Mendoza, también del MNCN. «Existe un aparente determinismo en las redes tróficas que, según parece, emerge por auto-organización, como resultado de la optimización en la explotación de los recursos disponibles. En concreto, encontramos seis formas básicas de organización trófica, a las que denominamos: boreal, templada, semiárida, tropical estacional, tropical húmeda y depauperada» (ésta útlima, pobre en especies), puntualiza.

Los resultados también muestran que las actividades de nuestra especie afectan directamente a la estructura trófica de las comunidades, disminuyendo el número de especies de esas comunidades respecto a lo que se espera, en función el clima en el que viven. «Las estructuras depauperadas son muy interesantes. Las hemos encontrado en las islas oceánicas, en desiertos y en regiones polares, pero también en regiones muy afectadas por la actividad humana. En islas, es posible que dicha simplificación esté asociada a la dificultad de determinados niveles tróficos para colonizar estos territorios, pero también es posible que estén depauperadas por extinciones pasadas, inducidas por actividades humanas. De hecho, eso es lo que encontramos en algunas comunidades boreales o templadas de Europa y Norteamérica, que se están empobreciendo, o en comunidades tropicales, que se están transformando en semiáridas», explica Miguel Araújo. «Estos resultados nos ayudarán a predecir los efectos que el cambio climático y las distintas actividades humanas están teniendo ya y tendrán sobre la biodiversidad, puesto que las redes tróficas son la forma que ésta tiene de auto-organizarse para explotar de forma eficiente los recursos disponibles en los ecosistemas», concluye Araújo.

El estudio, titulado 'Climate shapes mammal community trophic structures and humans simplify them', aparece publicado en la revista Nature Communications.

2019-11-15

  • Esquema con las formas básicas de organización. Leyenda: grass gr, leaves lv, fruits fr, flowers fw, forbes fb, seeds sd, invertebrates inv, fish fs, small vertebrates sv, mammals (1–10 kg) sm, 10–100 kg mm, (>100 kg) lm / selective herbivores SH, plant material feeders PF, small carnivores SC, frugivores FR, folivores FL, mixed feeders (being both grazers and browsers), MF, omnivores OM, grazers Gz, piscivores PS, invertebrate feeders IF, large carnivores LC. Imagen: MNCN
    Esquema con las formas básicas de organización. Leyenda: grass gr, leaves lv, fruits fr, flowers fw, forbes fb, seeds sd, invertebrates inv, fish fs, small vertebrates sv, mammals (1–10 kg) sm, 10–100 kg mm, (>100 kg) lm / selective herbivores SH, plant material feeders PF, small carnivores SC, frugivores FR, folivores FL, mixed feeders (being both grazers and browsers), MF, omnivores OM, grazers Gz, piscivores PS, invertebrate feeders IF, large carnivores LC. Imagen: MNCN.