El entorno del Cañón de Almadenes estrena señalización para advertir a los visitantes de la presencia del águila perdicera y del especial cuidado que hay que tener al acercarse a la zona en esta época del año.
En estas fechas, esta rapaz requiere una especial tranquilidad, ya que atraviesa por su época de nidificación y cría, motivo por el que se ha decidido cerrar al paso de peatones y vehículos la senda que se adentra en el Cañón hasta el 15 de julio.
Los carteles recién colocados informan de los puntos de corte, de manera que se pueda visitar la zona sin peligro para las personas y sin ocasionar molestias a la fauna.
El Cañón de Almadenes es un territorio singular situado entre Calasparra y Cieza que alberga importantes valores naturales, entre ellos la presencia de especies amenazadas. Así, junto al águila perdicera viven el búho real, la chova piquirroja o la nutria.
El águila perdicera (o águila azor perdicera) (Aquila fasciata, antes Hieraetus fasciatus) presenta una población pequeña en la península Ibérica (de entre 733 y 768 parejas en 2003), donde ha sufrido una drástica disminución en la mitad norte, sureste y levante. Por ello, se encuentra En Peligro de Extinción en el Libro Rojo de las Aves de España.
2020-01-29