El Top 10 de las nuevas especies de 2018

Lo grande y lo pequeño, lo bello y lo extraño se encuentran entre los animales, plantas y microbios recién descubiertos anunciados como las diez mejores especies nuevas para 2018 por la Fundación estadounidense FSE, según informa la propia fundación en una nota de prensa.

En concreto, el comité internacional de taxónomos del Instituto Internacional para la Exploración de Especies (IISE) de la entidad selecciona el Top 10 de entre las aproximadamente 18.000 nuevas especies nombradas el año anterior.

En esta ocasión, el representante grande es un majestuoso árbol que se eleva hasta los 40 metros; y entre los pequeños hay un diminuto protista unicelular. La lista incluye un gran simio raro y el fósil de un león marsupial que vagaba por Australia en la época del Oligoceno tardío. También hay dos residentes en los mares del mundo: un pez de las profundidades del océano Pacífico y un brillante anfípodo de las frías aguas del océano Antártico.

Esta decimoprimera lista anual incluye también un escarabajo que parece ser parte de una hormiga, una planta que se asocia con un hongo, una bacteria que se parece al cabello y un escarabajo que reside en lo oscuro y tiene una interesante historia evolutiva.

Además de los dos habitantes de los océanos, las nuevas especies provienen de países de todo el mundo: Brasil, Costa Rica, Sumatra en Indonesia, España (las Islas Canarias), Japón, Australia y China. Y uno fue encontrado en un acuario en los Estados Unidos, se desconoce su origen en la naturaleza.

"Siempre me sorprende la cantidad de nuevas especies que aparecen y la variedad de cosas que se descubren", reconoce el presidente del FSE, Quentin Wheeler, director fundador del IISE. Wheeler y el IISE publican la lista cada año como una lección sobre el valor de la exploración de especies y la biodiversidad.

"Nombramos alrededor de 18.000 especies por año, pero creemos que al menos 20.000 por año se van a extinguir ... Muchas de estas especies, si no las encontramos, nombramos y describimos ahora, se perderán para siempre. Y aún así pueden enseñarnos mucho sobre las complejidades de los ecosistemas y los detalles de la historia evolutiva. Cada uno de ellos ha encontrado una manera de sobrevivir frente a las probabilidades de cambios en la competencia, el clima y las condiciones ambientales. Por lo tanto, cada uno puede enseñarnos algo que realmente vale la pena conocer ".

Para el científico, "la gente está alterando los hábitats y cambiando el clima". "Por más inconveniente que sea adaptarse al Cambio Climático con nuestros cultivos y reubicar las ciudades en los escenarios más extremos, lo que no podemos hacer es recuperar las especies una vez que se hayan ido".

Esta lista de los mejores descubrimientos de la ciencia se hace pública alrededor del 23 de mayo para reconocer el cumpleaños de Carolus Linnaeus, un botánico sueco del siglo XVIII que es considerado el padre de la taxonomía moderna. Estos son algunos de los detalles de las especies elegidas para el Top 10:

Protista Ancoracysta twista

Descubierto en un acuario en San Diego, California, EE. UU., este nuevo protista unicelular ha desafiado a los científicos a determinar sus parientes más cercanos. No encaja bien en ningún grupo conocido y parece ser un linaje de Eukaryota previamente no descubierto con un genoma mitocondrial singularmente rico. Los eucariotas son organismos con células en las que el material genético se organiza en un núcleo unido a la membrana. (Los procariotas, como las bacterias y las arqueas, carecen de tal núcleo organizado). Los eucariotas incluyen protistas unicelulares así como organismos multicelulares que comúnmente consideramos animales, plantas y hongos. Ancoracysta twista utiliza sus flagelos con forma de látigo para impulsarse a sí mismo y orgánulos inusuales con forma de arpón para inmovilizar a otros protistas de los que se alimenta. El inusualmente gran número de genes en su genoma mitocondrial abre una ventana a la evolución temprana de los organismos eucarióticos.

Árbol del bosque atlántico (Dinizia jueirana-facao). Brasil

El género Dinizia de leguminosas se conocía, hasta ahora, por una sola especie de árbol amazónico descubierta hace casi 100 años. Dinizia jueirana-facao, de hasta 40 metros de altura, emerge por encima del dosel del bosque atlántico semi-caducifolio, ribereño y prístino donde se encuentra. Este enorme árbol, con un peso estimado de 62 toneladas, es más pequeño que su especie hermana amazónica y carece de sus contrafuertes, pero es igualmente impresionante. Solo se lo conoce dentro y más allá de los límites de la Reserva Natural Vale en el norte de Espirito Santo, Brasil. Aunque es grande en dimensión, el árbol está limitado en número: se sabe de sólo 25 individuos, aproximadamente la mitad de los cuales están en el área protegida, lo que lo pone en peligro crítico. Las frutas leñosas también son impresionantes en tamaño, alcanzando cerca de medio metro de longitud. Más de 2.000 especies de animales vertebrados viven en el bosque atlántico, incluyendo casi 200 especies endémicas de aves. Este bosque es el hogar de más de la mitad de las especies animales amenazadas en Brasil, pero su área de distribución ha sido severamente disminuida y fragmentada, quedando quizás el 15 por ciento de sus más de 1.3 millones de kilómetros cuadrados.

Anfípodo: Epimeria quasimodo. Océano Antártico

Este anfípodo, de aproximadamente 50 mm de longitud, lleva el nombre del personaje de Víctor Hugo, Quasimodo el jorobado, en referencia a su espalda algo jorobada. Es una de las 26 nuevas especies de anfípodos del género Epimeria del océano Austral con increíbles espinas y colores vivos. El número de especies, y sus extraordinarias estructuras morfológicas y colores hacen del género Epimeria un ícono del océano Austral que incluye tanto a los depredadores que nadan libremente como a los alimentadores de filtro sésiles. El género es abundante en las aguas glaciales que circulan al sur del Frente Polar y sus adornos en forma de cresta recuerdan a los dragones mitológicos. Cuando se publicó un tratamiento del género en 2007, muchos investigadores asumieron que las especies eran bastante conocidas. Sin embargo, utilizando una combinación de morfología y evidencia de ADN, un par de investigadores belgas han demostrado en su monografía completa lo poco que sabemos de estos invertebrados espectaculares.

Escarabajo caminador camuflado Nymphister kronaueri. Costa Rica 

Se trata de un pequeño escarabajo que vive entre las hormigas. Con aproximadamente 1,5 mm de longitud, 16 de ellos podrían alinearse de frente a la cola en el espacio de una 2,5 cm. Pero su historia se pone mucho mejor. Viven exclusivamente entre una especie de hormiga militar, Eciton mexicanum. Las hormigas anfitrionas, al igual que otras hormigas militares, no construyen nidos permanentes, sino que son nómadas. En este caso, pasan de dos a tres semanas en movimiento, realizando redadas cada día para capturar miles de objetos de presa, y luego pasan de dos a tres semanas en un solo lugar. Mientras que el escarabajo puede moverse y alimentarse mientras la colonia anfitriona está estacionaria, debe hacer el viaje con las hormigas cuando están en movimiento a una nueva ubicación. El cuerpo del escarabajo es el tamaño, la forma y el color precisos del abdomen de una hormiga trabajadora. El escarabajo usa sus partes bucales para agarrar la parte delgada del abdomen del hospedador y aguantar, dejando que la hormiga camine. De un vistazo, una hormiga con el escarabajo a bordo parece tener dos abdómenes, pero la superior es un escarabajo. Como otros mirmecófilos (literalmente, amantes de las hormigas), estos escarabajos deben usar señales químicas u otras adaptaciones para evitar convertirse en presas. Exactamente cómo funciona esto en el caso de N. kronaueri, aún no se ha determinado.

Orangután de Tapanuli (Pongo tapanuliensis). Sumatra, Indonesia

Está en gran peligro de extinción. Hasta ahora, solo media docena de grandes simios no humanos han sido reconocidos. Los gorilas, chimpancés y bonobos orientales y occidentales están más estrechamente relacionados con los humanos que los orangutanes, que son los únicos grandes simios de Asia. En 2001, los orangutanes de Sumatra y Borneo fueron reconocidos como especies distintas, Pongo abelii y P. pygmaeus. Un equipo internacional de investigadores, que examinó las pruebas morfométricas, de comportamiento y genómicas, concluyó que una población aislada en el límite sur de los orangutanes de Sumatra, en Batang Toru, es distinta de las especies del norte de Sumatra y Bornea. La evidencia genómica sugiere que si bien las especies del norte de Sumatra y Borneo se separaron hace unos 674 mil años, esta especie del sur de Sumatra se separó mucho antes, hace aproximadamente 3.38 millones de años. Tan pronto como se determinó el significado de esta población aislada, se reveló el gran simio más en peligro del mundo. Se estima que solo existen 800 individuos en un hábitat fragmentado que se extiende sobre aproximadamente 1.000 kilómetros cuadrados, en colinas de elevación media y bosques submontanos desde aproximadamente 300 a 1.300 metros obre el nivel del mar, con poblaciones más densas en bosque primario. El tamaño es similar a otros orangutanes, con hembras de menos de 1,21 metros de altura y machos de menos de 1,53.

Pez caracol de Swire (Pseudoliparis swirei). Océano Pacífico Occidental

Es el pez más profundo del mar En el oscuro abismo de la Fosa de Mariana, en el Pacífico occidental, se encuentra el punto más profundo de los océanos del mundo y el pez más profundo que se haya descubierto con profundidad comprobada. Un gran número de las nuevas especies fueron atraídas a las trampas cebadas con caballa. Pseudoliparis swireies un pez pequeño, parecido a un renacuajo, que mide un poco más de cuatro pulgadas de largo (112 mm), pero parece ser el principal depredador en su comunidad bentónica en el fondo de este mar particularmente profundo. Fue capturado a profundidades entre 22,000 y 26,000 pies (6,898 y 7,966 m). Se grabó un pez en la cámara a una profundidad aún mayor, a casi 27,000 pies (8,143 m), pero no se recuperó y no se pudo confirmar que sea la misma especie. P. swirei pertenece a la familia del pez caracol, Liparidae. Entre las más de 400 especies nombradas de la familia están los peces que se encuentran en todas las profundidades, desde las piscinas intermareales hasta los tramos más profundos. Se cree que alrededor de 27,000 pies (8,200 m) es un límite fisiológico por debajo del cual casi todos los peces no pueden sobrevivir.

Flor heterótrofa (Sciaphila sugimotoi). Isla Ishigaki, Japón

La mayoría de las plantas son autótrofas, capturan energía solar para alimentarse por medio de la fotosíntesis. Unas pocas, como ésta, recientemente descubierta, son heterótrofos, derivando su sustento de otros organismos. En este caso, la planta es simbiótica con un hongo del cual deriva nutrición sin dañar al compañero. De hecho, la familia de plantas Triuridaceae a la que pertenece se compone completamente de tales mycoheterotrophs (hongos simbiontes). El descubrimiento de cualquier nueva especie de planta en Japón es digno de mención ya que la flora está bien documentada, por lo que una nueva flor tan hermosa es una adición emocionante. El delicado S. sugimotoi, de poco menos de 10 cm gadas de altura, aparece durante los cortos períodos de floración en septiembre y octubre, produciendo pequeñas flores. La especie se considera críticamente en peligro de extinción, ya que se ha encontrado en solo dos lugares de la isla en bosques húmedos de hoja ancha de hoja perenne, representados por unas 50 plantas. Al igual que con otros simbiontes de hongos, la especie depende de un ecosistema estable para la supervivencia.

Bacteria volcánica (Thiolava veneris). Islas Canarias

Cuando el volcán submarino Tagoro entró en erupción en la costa de El Hierro en las Islas Canarias en 2011, aumentó bruscamente la temperatura del agua, disminuyó el oxígeno y liberó cantidades masivas de dióxido de carbono y sulfuro de hidrógeno, eliminando gran parte del ecosistema marino existente. Tres años después, los científicos encontraron los primeros colonizadores de esta área recién depositada: una nueva especie de proteobacterias que producen largas estructuras similares a pelos compuestas de células bacterianas dentro de una vaina. Las bacterias formaron una colchoneta blanca masiva, que se extendió por unos 2.000 metros cuadrados alrededor de la cima del cono volcánico de Tagoro recién formado a profundidades de unos 129-132 metros. Los científicos que informaron sobre la nueva especie concluyeron que las características metabólicas únicas de las bacterias les permiten colonizar este fondo marino recién formado, allanando el camino para el desarrollo de ecosistemas en etapa temprana. Llamaron a la estera filamentosa de las bacterias "pelo de Venus".

León marsupial (Wakaleo schouteni).  Australia (fósil)

A finales del Oligoceno, que terminó hace unos 23 millones de años cuando llegó el Mioceno, un león marsupial, Wakaleo schouteni, vagó por el hábitat de bosque abierto de Australia en el noroeste de Queensland, acechando a su presa. Científicos de la Universidad de Nueva Gales del Sur recuperaron fósiles en el Área de Patrimonio Mundial de Riversleigh en Queensland, que resultó ser un león marsupial fósil desconocido hasta ahora. Con un peso aproximado de 50 libras, más o menos del tamaño de un perro husky siberiano, este depredador pasó parte de su tiempo en los árboles. Sus dientes sugieren que no dependía completamente de la carne, sino que era, más bien, un omnívoro. Es parte de un linaje (el género Wakaleo) que siguió la regla de Cope durante el Mioceno, aumentando en tamaño a través del tiempo, posiblemente en respuesta a presas más grandes que, a su vez, evolucionaron a medida que la flora cambiaba a medida que el continente se volvía más seco y frío. Según su descubrimiento, los investigadores creen que dos especies de leones marsupiales estaban presentes a fines del Oligoceno hace 25 millones de años. El otro, Wakaleo pitikantensis, era un poco más pequeño y se identificó a partir de los huesos de los dientes y las extremidades descubiertos cerca del lago Pitikanta en el sur de Australia en 1961.

Escarabajo de las cavernas (Xuedytes bellus). China

Los escarabajos que se adaptan a la vida en la oscuridad permanente de las cuevas a menudo se parecen entre sí en una serie de características que incluyen un cuerpo compacto, apéndices muy parecidos a las de una araña y pérdida de vuelo, alas, ojos y pigmentación. Tales escarabajos troglobíticos son un excelente ejemplo de evolución convergente, es decir, especies no relacionadas que desarrollan atributos similares a las adaptaciones a fuerzas de selección similares. Una nueva especie de escarabajo de tierra troglobítico de China, de unos 9 mm de largo, sorprende por el dramático alargamiento de su cabeza y protórax, el segmento del cuerpo inmediatamente detrás de la cabeza al que se une el primer par de patas. Xuedytes bellusfue descubierto en una cueva en Du'an, provincia de Guangxi, China. Como gran parte del sur de China, esto se encuentra en un vasto paisaje cárstico plagado de cuevas y hogar de la mayor diversidad de escarabajos terrestres cavernícolas (familia Carabidae) en el mundo. Hasta la fecha, más de 130 especies, que representan cerca de 50 géneros, se han descrito en China. Este nuevo es un espectacular complemento a la fauna.

2019-05-24