Científicos de diferentes instituciones están realizando un gran esfuerzo para ampliar el conocimiento sobre los últimos bosques marinos de la península Ibérica, conocer las causas de la regresión que están experimentando en las últimas décadas y determinar las posibles soluciones para mitigar este retroceso, según informa en una nota de prensa el Instituto Español de Oceanografía (IEO), que detalla que en estos estudios ha tomado gran importancia la colaboración ciudadana a través del programa #BosquesMarinos2030.

Algunos de estos últimos bosques marinos peninsulares sobreviven en el litoral de Galicia y algunas zonas del mar Cantábrico. Están formados por grandes algas laminariales conocidas como kelps o quelpos, que consisten en varias especies de algas pardas de gran tamaño, que pueden llegar a vivir más de diez años y que forman espesas formaciones. Estos bosques son ecosistemas de gran importancia y que aportan interesantes servicios ecosistémicos.

Para su investigación, la colaboración ciudadana es una herramienta que "permite tener ojos en muchas zonas de la costa y obtener información de la abundancia y cambios en la distribución de las laminariales". Así, para recopilar el máximo de información científica sobre estos bosques marinos, se ha formado una alianza de proyectos en los que investigadoras del IEO, la Universidad de A Coruña y la Universidad Rey Juan Carlos han lanzado el programa #BosquesMarinos2030 con el que pretenden impulsar la colaboración de submarinistas, pescadores y cualquier persona interesada en el medio marino que pueda dar información sobre la localización y estado de estas especies.

En concreto, el proyecto Diversimar (Red de observación de la biodiversidad marina y pesquera de Galicia y Cantábrico), desarrolla una herramienta web de ciencia ciudadana para el estudio de la biodiversidad. Está basada en una web desarrollada por el Centro de Supercomputación de Galicia (Cesga) que incluye un catálogo de especies de fauna y flora y mapas interactivos. Uno de sus objetivos es posibilitar que cualquier persona interesada pueda enviar sus fotos y hallazgos para que formen parte de la gran base de datos y aparezcan referenciados en el visor de mapas. Así, cualquier ciudadano puede enviar fotos y datos de los bosques de laminarias a través de la página www.diversimar.es mediante un formulario web. Los investigadores recopilarán la información y responderán a la persona que colabore. Varios submarinistas y pescadores ya han comenzado a participar en el programa y a enviar sus hallazgos. Cualquier persona que encuentre algas de estas especies durante paseos por el litoral también puede también colaborar enviando sus fotos.

El proyecto Diversimar está coordinado por el IEO y el Cesga -y liderado por Eva Velasco y Julio Valeiras del IEO-, y cofinanciado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Transición Ecológica y del Reto Demográfico. La herramienta de participación ciudadana que contiene fue presentada recientemente en una jornada técnica titulada 'En busca de los últimos bosques marinos de Galicia y el Cantábrico', en la que se habló de los diferentes proyectos y se explicó cómo participar a través de la web.

Y es que , además de éste, en la actualidad hay otros tres proyectos dedicados al estudio de las laminarias en Galicia y el Cantábrico que integran esta iniciativa de ciencia ciudadana. Uno es el programa de seguimiento de quelpos dentro del proyecto Esmares, dedicado a la evaluación de las Estrategias Marinas, que lideran Lara Arroyo y Alberto Serrano del IEO en Santander. Está también el proyecto Herbikelp, que lidera Cristina Piñeiro-Corbeira, de la Universidad de A Coruña, para el estudio de los impactos, consecuencias y medidas de gestión adaptativa para los bosques de laminariales. E, igualmente, el proyecto Save Kelps, liderado por Brezo Martínez Díaz-Caneja, de la Universidad Rey Juan Carlos, estudia la vulnerabilidad climática de los bosques de kelp.

Los bosques de quelpos equivalen a los bosques terrestres y forman ecosistemas muy productivos y de alto valor ecológico. Son el hábitat de multitud de especies de flora y fauna marina, y sirven como alimento, sustrato, protección y zona de reproducción y alevinaje de muchas especies, incluidas muchas de interés pesquero. Asimismo, proporcionan muchos servicios ecosistémicos beneficiosos para el medio marino y para el hombre, protegiendo la costa al controlar el efecto del oleaje y actuar como arrecifes naturales protectores de las playas.

Sin embargo, en las últimas décadas estas algas han sufrido una regresión y desaparición a lo largo del litoral español debido a diferentes factores bióticos, oceanográficos y al efecto del cambio climático. Su desaparición provoca modificaciones de los hábitats marinos y una disminución preocupante de la biodiversidad marina.

2021-04-28

  • Bosque de laminarias en aguas de Galicia. Imagen: Carlos Suárez / OCEANA
    Bosque de laminarias en aguas de Galicia. Imagen: Carlos Suárez / OCEANA.