La utilización de biofiltros combinada con tratamientos físico-químicos, compostaje los purines de cerdo, desecación térmica o biodigestión son algunas de las medidas que proponen los investigadores del Grupo Gestión, Aprovechamiento y Recuperación de Suelos y Aguas (Garsa) de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) para evitar los daños ambientales derivados de la gestión inadecuada de los purines en las granjas de cerdos, segúninforma la institución docente en una nota de prensa.

Los investigadores defienden que «la gestión a la carta es posible para valorizar los purines en función del entorno de la explotación porcina», y resaltan la necesidad actual de reducir las emisiones atmosféricas (amoniaco y gases de efecto invernadero) y de implantar planes de gestión integral de subproductos ganaderos.

«Las granjas de producción porcina intensiva son totalmente sostenibles desde el punto de vista medioambiental si se gestionan implementando las mejoras técnicas disponibles», afirma Ángel Faz, investigador principal Garsa.

Estas medidas se han propuesto en la jornada ambiental 'Avances en Sostenibilidad Ambiental y Socioeconómica de la Producción Porcina Intensiva', celebrada en la Feria Ganadera, Industrial y Agroalimentaria Sepor 2019, de Lorca.

La jornada ambiental, coordinada por Ángel Faz Cano, ha sido organizada por Garsa y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y auspiciada por las cátedras en Gestión Medioambiental Sostenible de la Producción Porcina y en Gestión Integral del Agua en Producción Porcina con las empresas CEFU, S.A. y Agropor, respectivamente.

Los investigadores de la UPCT buscan soluciones a los problemas derivados de la gestión de purines desde hace más de 20 años con financiación regional, nacional y europea. En la actualidad, dos Cátedras de Empresa vuelcan sus esfuerzos a conseguir la gestión sostenible, la reducción de la huella de carbono y cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) impulsados por Naciones Unidas.

España es el mayor productor porcino de Europa con alrededor de 28 millones de cabezas. La gestión de los purines es importante, según Faz, ya que más del 95% es agua, que se puede reutilizar para riego, pero el resto de los componentes incluyen nitrógeno, fósforo o potasio, entre otros, que deben gestionarse adecuadamente para garantizar la sostenibilidad de las explotaciones intensivas. A juicio del investigador, «en cuencas deficitarias como la del Segura, es un valor añadido poder disponer de este recurso adicional».

 

  • Biofiltros para el tratamiento de purines, utilizados en una explotación porcina de Alhama de Murcia. Imagen: UPCT
    Biofiltros para el tratamiento de purines, utilizados en una explotación porcina de Alhama de Murcia. Imagen: UPCT.