Aunque la fecha fijada por el Gobierno del Principado de Asturias para el comienzo de las batidas de lobos era el día de hoy, "la incertidumbre legal alrededor de esta medida injustificada y desproporcionada ha hecho que se retrasen hasta la semana que viene", según la última información recabada por la asociación conservacionista WWF.
En una nota de prensa, WWF señala que las primeras batidas con cazadores previstas para hoy en se situaban en los Concejos de Candamo, Las Regueras e Illas, pero "se han pospuesto hasta la semana que viene según la información de WWF. En declaraciones públicas, los presidentes de los cotos de caza han pedido tener “el papel en la mano” antes de empezar a matar lobos, una prueba de la incertidumbre legal que rodea a la orden del Gobierno del Principado".
Por su parte, la organización ha exigido por carta al presidente del Principado, Javier Fernández, que le remita "con urgencia el calendario con todas las batidas programadas con cazadores y las resoluciones firmadas que autorizan cada una de ellas".
Según la propia normativa del Gobierno asturiano, indica la nota, "las batidas sólo deberían autorizarse en “circunstancias excepcionales” y en caso de un “elevado número de daños” a la cabaña ganadera. Por ello, para WWF es evidente que debe existir un permiso para cada una de estas batidas “excepcionales” y también una justificación específica para matar a esta especie protegida". Y es algo que, según WWF, "no se da en las circunstancias actuales".
Por todo ello, "WWF está informando puntualmente a la Fiscalía sobre el desarrollo de los hechos y denunciará cualquier actuación administrativa que se realice a sabiendas de su ilegalidad". La organización pide al presidente Javier Fernández que rectifique y reconsidere esta medida absolutamente desproporcionada, injustificada e ilegal. Casi 20.000 personas de toda España se han sumado en tres días a la petición de WWF para que Javier Fernández detenga el exterminio oficial del lobo en Asturias.